El fin del PRI-Sonora

El secretario de Gobierno, con el anuncio de su retiro político, abre las puertas para dar paso a los nuevos tiempos y a la reestructuración del tricolor

Por Alejandro Matty Ortega - 2009-07-14

El virtual retiro del secretario de Gobierno, Wenceslao Cota Montoya, abre las puertas al nuevo escenario político donde la figura social del panista Guillermo Padrés Elías se perfila como la responsable del fin del PRI-Sonora.

El brazo fuerte de la Dinastía Boursista y el hombre donde se finca la actual paz en Sonora pese a algunas exaltaciones naturales, se retira de la política y su anuncio, antecede a una larga lista de funcionarios y priístas que dejarán, momentáneamente, las pasarelas ante la opinión pública.

El efecto Padrés en el Estado, con el evidente impacto del incendio de la Guardería ABC, los movimientos sindicales del Steus, Staus, UTH, pescadores, posesionarios del Vaso de la Presa, mineros de Cananea y un Gobierno etiquetado como represor, colocan al tricolor en una nueva reestructuración donde todos tendrán las mismas oportunidades.

La jornada electoral del pasado 5 de julio dio al PRI-Sonora la lección de que en un instituto político nadie es dueño y señor de las voluntades partidistas y humanas, todos y cada uno de sus integrantes, tienen voz y voto y nadie, pero nadie, le debe rendir tributo a nadie.

En un Sonora donde 38 alcaldías serán gobernadas por Acción Nacional y el 73 por ciento de la población estará bajo su circunscripción, obliga a la reflexión y abre las expectativas para una nueva generación de priístas comprometidos con la sociedad y no con determinado grupo de poder.

En las principales ciudades del Estado, incluyendo la Capital, por primera vez, los priístas no podrán colocarse en algún cargo público por lo que tendrán al menos 3 años para reivindicarse y reorganizar su plataforma política y solidarizarse con las bases.

El flamante secretario de Gobierno ya tiene listo el protocolo de entrega-recepción del estado que guarda la administración pública estatal pero además, seguramente depositará en la gente de Guillermo Padrés, un Sonora con paz social aún con expresiones de inconformidad –naturales- por las víctimas ABC.

La decisión del secretario Cota Montoya marca el principio del fin del otrora partido más poderoso en la historia del Estado pero también, anuncia el comienzo de la reconstrucción de un nuevo PRI que no permitirá que tenga un solo dueño, sino que será incluyente y volteará a las bases, esas que en esta ocasión, le negaron su voto.

El nuevo escenario político ubica a todos los sonorenses en mejor posición para exigir a Guillermo Padrés que cumpla con las expectativas sociales y que no se le olvide que aquí en Sonora, se gobierna en Democracia y no se permitirá otra mandatario estatal que lo haga en Monarquía.

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